¡Madre mía!, qué asombroso experimento…
Podemos hacer en él los dibujos que queramos: un pez, un árbol, una hoja, una manzana, formas geométricas…
Además, los materiales que se utilizan en éste son baratos y muy accesibles para todos…sólo se necesita tiempo para crear e imaginar…
Cris, nos demuestra en este actividad cómo nuestras obras de arte, van a recobrar vida. Y es a través de la fuerza de adhesión entre materiales, en concreto entre el mínimo adhesivo de la tinta de los rotuladores tipo Vileda (los que se usan en las pizarras blancas) y una superficie muy pulida, como es un plato. Estas tintas no son solubles en agua, así que los trazos de los dibujos permanecerán «unidos» entre sí. Y al añadir el agua surge una fuerza de flotación que empuja la tinta hacia arriba, porque la tinta es menos densa que el agua.
¿Ya estáis preparados?. Poneros la ropa de faena, y al lío…
Ready, steady, GOOOOOO!
Un beso flotante.
El Equipo de Infantil.